La bioquímica clínica es una especialidad de la patología, que es el estudio de las enfermedades. La bioquímica clínica intenta diagnosticar y manejar enfermedades a través del análisis de sangre, orina y otros fluidos corporales.
Un bioquímico clínico toma una muestra de fluido corporal y lo analizará en un laboratorio. Los resultados más tarde se emplearán para poder concretar un diagnóstico y un tratamiento.